Uno de los rasgos más destacables de la elaboración de vino en Cataluña es precisamente su larga tradición, desde que fenicios y griegos llegaron a nuestras costas.
La investigación del ICAC puede aportar nuevos testimonios históricos de esta milenaria tradición y demostrar que en un espacio contiguo a la misma bodega experimental de Mas dels Frares, donde hoy en día se forman futuros enólogos y enólogas, ya se hacía vino en época romana.
Este mes de septiembre han empezado los trabajos arqueológicos en el yacimiento de la villa romana de Mas dels Frares. Se trata de un yacimiento construido durante el cambio de Era que perduró hasta finales del siglo VII. La excavación, que tiene previsto finalizar la primera quincena de octubre, es la primera fase del proyecto «Estudio y difusión de la villa romana de Mas dels Frares (Constantí, Tarragonès)», financiado por la Generalitat de Catalunya y el Consejo Regulador Denominación de Origen Cataluña, con la colaboración de la Facultad de Enología de la Universidad Rovira i Virgili. El proyecto finalizará en 2021 y tiene por objetivo conocer la realidad arqueológica de esta villa romana del territorium de la antigua Tarraco.
En una intervención previa liderada por el ICAC se localizaron en el yacimiento restos de un almacén agrícola con grandes tenazas, muy probablemente para la fermentación del vino, y un amplio sector termal, objeto de estudio de los trabajos actuales. La villa romana se ubica en el término municipal de Constantí, a 1,5 km de esta localidad y, justamente, al lado de la bodega experimental de la Facultad de Enología de la URV.
La ubicación del yacimiento arqueológico, al lado de la Bodega Mas dels Frares de la Facultad de Enología de la URV, ofrece la posibilidad de desarrollar un proyecto museográfico que enlace con la tradición vinícola del país y que amplíe la oferta cultural en el interior de la Costa Dorada, en general, y en los municipios implicados, en particular.
Con esta nueva iniciativa todas las instituciones participantes quieren desarrollar un proyecto patrimonial integral que combina la investigación científica, la actividad pedagógica del trabajo de campo y la arqueología experimental alrededor de la producción vinícola, con acciones de divulgación y socialización científicas.
El pasado mes de junio de 2019 se firmó el convenio de colaboración que ha permitido sacar adelante el proyecto.