La investigadora MSCA Simona Perna (ArPA) ha hecho un viaje por distintos museos de Europa para completar la base de datos sobre jarrones de mármol blanco de su proyecto de investigación en el ICAC.
Grecia, Países Bajos, Inglaterra, Italia… Los jarrones de mármol blanco procedentes de la Grecia antigua se encuentran diseminados por museos de toda Europa. Poco sabemos sobre ellos: las publicaciones existentes son antiguas, no incluyen medidas detalladas u otras especificaciones de las piezas, hay pocas fotografías o son de poca calidad…
La investigadora MSCA Simona Perna (TechNet Project) se ha propuesto hacer una clasificación exhaustiva de estos objetos e identificar sus marcas de trabajo, para entender cómo se elaboraron y qué herramientas usaron los artesanos que los creaban.
En concreto, Perna (ArPA) quiere determinar si en la elaboración de los jarrones de mármol blanco en la antigua Grecia se utilizaba el torno. Por el momento, ha encontrado evidencias (marcas importantes) que probarían que se utilizaba este tipo de máquina en la elaboración de jarrones de mármol.
Investigar en tiempo de COVID
Debido a las restricciones sanitarias, la investigadora MSCA Simona Perna ha tenido que concentrar todo el trabajo de campo en poco más de tres meses.
El pasado otoño de 2021, Simona Perna viajó por toda Grecia (museos de Atenas, Tesalónica, Braurón, Rodas, Eretas y Paros, entre otros). Después se desplazó a Ámsterdam, para ver una pequeña colección de cuatro jarrones, y prosiguió su periplo, esta vez hasta el British Museum de Londres, donde hay una amplia colección de estos jarrones que, con mucha probabilidad, son de origen griego, pero provienen de excavaciones muy antiguas (del siglo XIX) y son poco conocidos.
La última etapa del viaje la llevó a Italia (Roma, Boloña, Nápoles y Pompeya, entre otros), donde también estudió jarrones romanos, a fin de poder determinar la conexión entre las producciones griega y romana de este tipo de jarrones.
En total, Simona Perna (ArPA) ha estudiado, en pocas semanas, un total de 93 jarrones de mármol blanco, más una docena de jarrones de alabastro. Este conjunto conformará la base de datos de su proyecto y, en finalizarlo, funcionará como un catálogo virtual que publicará en línea y en acceso abierto.
Además de tener que concentrar las visitas, el tiempo del que ha dispuesto en cada museo ha sido también limitado, dado que los museos, durante la pandemia, han ido acumulando peticiones de investigadores que han visto pospuestos sus proyectos. Por eso, queremos aprovechar este espacio para poner en valor la labor que hacen los museos en el ámbito de la investigación y agradecer la amabilidad y buena predisposición con la que nos han atendido.
Este viaje ha cambiado totalmente la idea que tenía de estos objetos. Poderlos ver de cerca, las sensaciones que me han transmitido los materiales: el sonido, el tacto, la calidad, la delicadeza y, sobre todo, su grandeza. Me ha impresionado especialmente el mármol blanco de alabastro.
Debido a las restricciones, una cosa que Perna no ha podido hacer en todos los casos es la fotogrametría de las piezas: sacar muchas fotos del mismo objeto desde perspectivas diferentes para poder generar un modelo 3D. Esta técnica no se puede llevar a cabo en poco tiempo, puesto que se necesitan por lo menos unas 500 fotos del objeto.
La situación generada por la covid19 ha implicado desarrollar el trabajo de campo en condiciones de trabajo un poco extremas, con restricciones de acceso a las colecciones y con una importante limitación de tiempo para estudiar las piezas. Aun así, Perna ha conseguido el material suficiente para avanzar en su proyecto y realizar los análisis necesarios para refutar su hipótesis.
De la teoría a la práctica
La principal técnica de análisis ha sido la observación: con una pequeña lupa y con luces diferentes, Perna ha podido identificar marcas de trabajo, determinar la calidad de la piedra del mármol y tomar medidas de las piezas (diámetro, altura, profundidad, peso…).
Para la toma de medidas ha utilizado distintas herramientas, como un calibrador electrónico y una báscula para tomar el peso de los objectos. Conocer el peso de los jarrones es muy importante para poder hacerse una idea del trabajo que suponía para los artesanos manejar y trabajar las piezas. También permite inferir, a la inversa, qué cantidad de piedra era necesaria para obtener un jarrón.
Con la observación y el análisis tópico de los jarrones (detalles y marcas en la superficie) se pueden hallar evidencias relevantes de su proceso de fabricación.
No ha podido, sin embargo, tomar muestras de las piezas (para ver de qué tipo de piedra se trataba, a partir de análisis arqueométricos), porque los jarrones son demasiado delicados y hay un riesgo importante de que se dañen. Quizás en un futuro, con el desarrollo de métodos de extracción de muestras y análisis menos invasivos, se puedan hacer estudios más profundos.
Algunos de los jarrones que he podido estudiar de cerca eran tan, tan pequeños, que me ha impresionado mucho pensar en el arte y la técnica con que el artesano debió de trabajar el mármol, sin romperlo y llegando a un nivel de detalle tan elevado.
Para tomar las fotos de los jarrones, Simona ha seguido la metodología de fotografía de productos en 360º, según la cual se coloca un objeto en una plataforma giratoria que rueda sobre su base de manera electrónica, se dispone la cámara digital (sobre un trípode) y un set de iluminación y, a medida que va girando la base, la cámara va tomando fotografías secuencialmente. A través de una aplicación, las imágenes se mandan automáticamente al ordenador. El resultado es una visión de 360º del objeto.
El trabajo de los artesanos en la antigüedad clásica
Tanto valor tenía el mármol como el artesano que lo trabajaba. Simona Perna (ArPA) persigue con su proyecto no solo conocer en detalle los jarrones clásicos, sino el proceso de elaboración artesanal con el que se elaboraban. Una de las paradas más intensas de su viaje en 2021 ha sido la visita al taller d’Aristides S. Varias, un escultor de prestigio que vive y trabaja en la isla de Paros, muy conocido entre otras cosas por ser el autor de la escultura de Arquíloco de Paros, famoso poeta lírico griego del siglo VII a. C.
Paros es también la isla donde se producía uno de los mármoles más famosos del mundo antiguo: el mármol de Paros, que fue el preferido para elaborar esculturas y objetos de valor (como jarrones) desde el siglo VII a. C. hasta la época romana. Se trata de una variedad de mármol muy rar que se extraía del monte Parpessa y que se caracteriza por ser de grano fino, compacto, semitranslúcido y de un color blanco puro.
Este es el material con el que se elaboraron la mayoría de los jarrones que ahora estudia Simona Perna (ArPA). Por eso era tan importante para ella poder hablar con un artesano que conoce las características de este material de primera mano y que lo usa también para elaborar esculturas de manera artesanal.
Un objetivo a largo plazo del proyecto MSCA de Simona Perna es llegar a reproducir una réplica de estos jarrones siguiendo el proceso de trabajo de los artesanos de la antigüedad y usando los mismos materiales.
Por eso, el próximo viaje de esta investigadora ArPA será a la isla griega de Tenos, donde hay una escuela de escultores que trabajan con el mármol de Paros y que la podrán ayudar en desarrollar una réplica de un jarrón antiguo.
El mármol de Paros era también muy apreciado porque se podía pintar encima. En la mayoría de los jarrones estudiados hay una decoración exquisita, con pinturas de colores que hoy son muy raros (púrpura, oro…). El Museo de Atenas ha llegado incluso a analizar el uso de colores en estos jarrones, unos colores muy raros y difíciles de conseguir que, según parece, solamente las personas ricas podían permitirse.
Un indicio más del uso del mármol como elemento de distinción y que viene a confirmar el papel distintivo de lujo de este material en la época clásica. Perna está desarrollando también una teoría según la cual estos jarrones eran usados por mujeres para expresar cuestiones relacionadas con el género y el estatus social, y transmitir rituales conectados con el mundo femenino.